Uno de los asuntos más comentados de esta semana ha sido la próxima incorporación en Facebook de un supuesto botón de “no me gusta”, una opción que no servirá para manifestar animadversión ni negatividad, sino empatía (una cuestión sobre la que ha habido cierta confusión).
El añadido de esta demandada alternativa, así, no solo ha suscitado opiniones en la red a favor y en contra (pues algunos le achacan una supuesta utilidad para, por ejemplo, llevar a cabo prácticas intimidatorias), sino que ha dado lugar a un sinfín de artículos relacionados que especulan sobre otros “pulsadores igualmente útiles”, y también acerca del aspecto del icono.
Las propuestas del diseño
Teniendo en cuenta que el diseño del prototipo todavía no se ha dado a conocer, nos quedamos con las ideas que propone Wired y que ha recabado de un puñado de reconocidos profesionales del sector:
Según la publicación y a pesar de que Zuckerberg quiere desterrar la negatividad de este nuevo botón, “es totalmente posible que Facebook le de a la gente el símbolo de los pulgares hacia abajo que ellos piensan que quieren”. Si finalmente lo hacen, eso sí, deberán estar a la altura para afrontar los conflictos que se deriven.
Fuente: Genbeta