En 2014 los inversores de capital riesgo regaron las empresas de ciberseguridad con una cantidad récord de 2.300 millones de dólares (unos 2.000 millones de euros) en un año marcado por noticias frecuentes de pirateos a empresas de alto nivel. Las inversiones anuales en start-ups de ciberseguridad llevan varios años seguidos aumentando y, desde el año 2011, este aumento ha sido del 156%, según CB Insights. Es probable que esta tendencia continúe al alza ya que el 75% de los directores de información encuestados por Piper Jaffray afirmaron que aumentarían las cantidades destinadas a seguridad en 2015.
Aunque las tecnologías que ofrecen las start-ups probablemente no quiten demasiado poder a los atacantes, pueden ayudar a los negocios adaptarse a las elevadas probabilidades de que las ataquen, explica Lucas Nelson, quien se centra en la seguridad como uno de los inversores principales en Gotham Ventures. Las nuevas tecnologías que lleguen al mercado podrían ayudar a las víctimas de ataques reduciendo la cantidad de tiempo que se tarda en detectar a los hackers y revertir los daños producidos, afirma.
También ha aparecido una nueva clase de oportunidades debido a que durante los últimos cinco años gran parte del negocio se ha movido a la nube. «Nunca ha habido un nivel de gasto comparable en la seguridad para la nube», afirma Nelson.
A pesar de todo, la cantidad de dólares en inversión de capital riesgo que está llegando a la industria sigue siendo relativamente pequeña. En 2014 fue aproximadamente la décima parte de la cantidad invertida en toda la industria del software, según PricewaterhouseCoopers. Pero según la misma empresa, el crecimiento en inversión de capital riesgo en seguridad el año pasado en comparación con 2013 superó el aumento observado en toda la industria del software.
Fuente: MIT Technology Review