Vivimos unos tiempos en los que cualquier pequeño detalle puede marcar la diferencia entre seguir adelante en un proceso de selección o ser descartado. Esto nos obliga a cambiar nuestro planteamiento a la hora de buscar empleo frente a lo que habíamos venido haciendo anteriormente. La prueba la tenemos en que hoy día los currículums no deben tener más de una página frente a la extensión libre o incluso «cuanto más largo mejor» que tenían hace unos pocos años. También hoy día es altamente recomendable adaptar dicho currículum a los requisitos específicos del puesto al que nos presentamos, ajustando así detalles como la experiencia laboral o la formación profesional que incluimos en el mismo.
El motivo de estos cambios no es casual, sino que responde a la nueva realidad del mercado de trabajo. Por cada oferta de empleo, las empresas reciben centenares de currículums y cartas de presentación de candidatos, que, en muchos casos, podrían trabajar perfectamente en el puesto por poseer las características del mismo. Esto obliga a los responsables de selección a ser más precisos y a dedicar menos tiempo a leer cada uno de esos perfiles. Algunos estudios apuntan a que un consultor apenas dedica 5 o 6 segundos a determinar si un candidato es apto o no para un puesto. En consecuencia, destacar frente al resto es importante.
Una forma de hacerlo es enriquecer nuestra candidatura con detalles como nuestra propia firma. En este caso, esta no va a estar presente dentro del currículum, dado que este documento no requiere ser firmado. Pero sí podemos hacerlo a través de la carta de presentación, que es otro de los documentos que hoy día resultan imprescindibles para destacar a la hora de buscar trabajo y que antiguamente no se usaban apenas, salvo para los puestos de mayor importancia. Si quieres saber cómo puedes firmar tu carta de presentación y añadir ese extra a tu candidatura, te contamos todo lo que debes saber a continuación.
Qué es la firma electrónica
En la actualidad, la firma de documentos es algo que se está implantando en nuestra sociedad. Si has tenido que realizar cualquier tipo de gestión con el SEPE a través de la red, si has solicitado alguna ayuda la administración local o autonómica o, simplemente, has hecho cualquier gestión con una administración pública o incluso como una empresa, ya sabrás que en muchos de estos procesos es necesario realizar una firma electrónica. Esta firma electrónica añade a cualquier documento que presentes o que manejes para los cometidos antes citados la seguridad y certeza de la identidad del solicitante, especialmente en aquellos casos en los que se usa un certificado digital. En consecuencia, el uso de la firma electrónica supone una aportación adicional de seguridad a la hora de realizar trámites electrónicos de cualquier tipo. Este es el motivo por el que la firma electrónica cada vez está más de moda y se está implantando en todo tipo de administraciones.
Sin embargo, nada nos impide que podamos firmar digitalmente todo tipo de documentos, a fin de acreditar nuestra identidad y también de darle un toque más profesional a una carta de presentación, tal como venimos comentando. Es un detalle muy interesante para todo tipo de profesionales y especialmente para aquellos que trabajen en puestos relacionados con la administración o la atención al cliente, dado que saber manejar este tipo de firmas electrónicas también suele ser uno de los requisitos habituales para alcanzar un empleo de este tipo.
Cómo firmar tu carta de presentación digitalmente
Para firmar tu carta de presentación digitalmente dispones de varias opciones. La primera es incluir esa firma durante el proceso de edición de la misma. Generalmente, la carta la vamos a redactar mediante un procesador de textos que puede ser Microsoft Word, OpenOffice o incluso online a través de documentos de Google. En cualquiera de estos casos podemos insertar una imagen con nuestra firma real y colocarla allí donde debería estar la firma normal de la carta. Después, no tenemos más que imprimir la carta o guardarla en formato PDF para enviarla a donde sea necesario. Este es el proceso más sencillo, pero también el que peor queda a efectos de demostrar nuestro dominio de la firma digital.
La segunda opción es proceder a firmar la carta de forma directa mediante aplicaciones pensadas para ello de forma local. Antes de proceder necesitaremos tener nuestra carta ya redactada y guardada en formato PDF, lo que podemos hacer fácilmente con cualquiera de las aplicaciones mencionadas anteriormente. A continuación, abriremos la carta con una de las herramientas disponibles para proceder a su firma. Cuando se trata de firmar una carta de presentación de manera electrónica localmente, la opción más recomendable es firmar PDF a través de Adobe Acrobat, que nos permite realizar dicha firma directamente. Para proceder seleccionaremos la opción correspondiente a la firma en el menú y complementaremos la misma añadiendo tanto nuestro nombre como la propia firma. Esta puede ser una imagen escaneada de la firma o también se puede trazar a mano alzada, en un planteamiento similar al comentado para el paso anterior. También podemos firmar mediante nuestro certificado digital, lo que dejará dentro del documento una huella electrónica que demostrará la veracidad de la firma realizada.
Si no dispones de la herramienta que hemos comentado o simplemente prefieres una solución algo más rápida, puedes recurrir a algunas de las páginas web en las que firmar directamente tus documentos online sin necesidad de descargar nada. Para encontrar alguna de ellas no tienes más que recurrir a una simple búsqueda en Google y al momento verás varias páginas adecuadas para tal cometido. Una vez que hayas escogido una de ellas, no tienes más que cargar la carta de presentación en la interfaz del navegador, seguir las instrucciones en pantalla para realizar la firma de la carta y como último paso, descargar el documento una vez firmado y guardarlo en tu ordenador. En este caso, el acabado de la firma no queda tan bien como si lo hacemos con los programas locales que hemos mencionado, pero sí es una buena solución para mostrar conocimiento de cómo se firma digitalmente un documento y aportar este beneficio a tu carta de presentación.