Cuando la pandemia cambió nuestra forma de ver el mundo, uno de los paradigmas que más evolucionó fue el del trabajo en la oficina. Gran parte de los profesionales ya no se conforma con la idea de invertir un puñado de horas a la semana solo para desplazarse hasta el trabajo, sino que muchos se han vuelto reacios a interactuar con espacios obsoletos en materia tecnológica.
Necesidades de la oficina moderna
No es un evento al azar, sino de uno que responde a problemáticas modernas que van desde la necesidad de espacios para asegurar un trabajo “sin costuras” entre todos los departamentos, hasta una infraestructura segura donde sea posible desenvolverse profesionalmente sin riesgos, ya sean de naturaleza interna o externa.
Para el profesional moderno, la oficina debe estar a la altura de sus necesidades y las de la empresa, adaptándose tanto a los estándares del mercado laboral, como a las metas de crecimiento de todo el equipo. La necesidad más importante es ser capaces de crear un balance entre la productividad y la motivación, y las desventajas que puede implicar desplazarse hasta la oficina.
Seguridad
El primer espectro “macro” que tendremos que tomar en cuenta es la seguridad de la oficina, asegurando que podremos cumplir la jornada de forma tranquila y sin contratiempos. Estas son algunas innovaciones que están transformando la oficina en materia de seguridad:
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Control de acceso
A medida que el flujo de personal se vuelve más heterogéneo, con buena parte de los profesionales asistiendo a la oficina de manera desperdigada durante la semana, las empresas se ven obligadas a implementar nuevos sistemas para determinar quiénes entran y salen de las instalaciones en un periodo determinado.
El estándar actualmente son las tarjetas de control de acceso, que registran el «movimiento» dentro de las oficinas y crean un registro inalterable de ingresos y salidas. Sin embargo, también existen sistemas alternativos, como escáneres biométricos y multifactoriales que incluso pueden limitar el acceso a distintos departamentos según el rol de cada profesional.
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Videovigilancia
La videovigilancia está brindando mayores garantías a los empleados al fusionarse con nuevas tecnologías. Por ejemplo, los dispositivos equipados con inteligencia artificial son capaces de detectar actividad sospechosa o situaciones de riesgo laboral de manera automática, alertando al personal en un instante.
Otro ejemplo es el de las cámaras corporales interconectadas con tecnología “wearable”, que pueden activarse de forma autónoma si detectan un comportamiento errático en los signos vitales del personal.
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Ciberseguridad
El aumento en la demanda de profesionales de ciberseguridad no es una coincidencia, sino la respuesta a un fenómeno de riesgo que enfrentan, especialmente, las pequeñas y medianas empresas. Estos ataques no solo ponen en peligro la operatividad de la empresa, sino que pueden exponer datos privados de empleados, e incluso solicitantes.
Por eso las empresas más innovadoras están invirtiendo en la implementación de nuevas herramientas de ciberseguridad, especialmente software antivirus basado en inteligencia artificial que, además de detectar amenazas digitales, es capaz de “aprender” de cada evento para adaptarse a nuevos riesgos, acelerando la detección y toma de decisiones en respuesta a ataques futuros.
Tecnología
Pero la innovación en la oficina no solo debe tomar en cuenta la seguridad, sino también aquellas herramientas que potencien la productividad y aseguren que todo el equipo se mantenga motivado. Al pensar en aceptar un nuevo puesto de trabajo, debes asegurarte de que la empresa cuenta con lo siguiente:
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Transmisión audiovisual
El trabajo híbrido ha llevado a que cada vez más empresas trabajen de manera “fragmentada” con el equipo distribuido entre empleados presenciales y remotos. Si bien esto es una ventaja importante al momento de comenzar a trabajar para una empresa, también es cierto que puede ser un dolor de cabeza si la oficina no cuenta con las herramientas de comunicación adecuadas.
Los sistemas de transmisión audiovisual están diseñados para brindar una mejor calidad de audio y video, pero también pueden integrarse de forma sencilla en distintos dispositivos y con distintas herramientas de productividad y monitoreo, haciendo que el trabajo colaborativo sea mucho más eficaz.
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Internet de alta velocidad
Este trabajo colaborativo es lo que hace que contar con un internet de alta velocidad sea una necesidad en la oficina moderna, siendo este responsable tanto de asegurar comunicaciones ininterrumpidas, como la capacidad de compartir archivos pesados en poco tiempo a través de la nube.
No es coincidencia que, con la pandemia, el uso de banda ancha corporativa haya crecido de forma significativa en todo el mundo, siendo la forma más efectiva de lograr que cada departamento lleve a cabo sus labores “sin costuras”.
Aunque una oferta atractiva pueda parecer suficiente al momento de iniciar una nueva aventura profesional, es importante que te asegures de que la empresa cuenta con la capacidad (e iniciativa) para adaptarse a las nuevas tendencias tecnológicas, ya que esto puede determinar tu experiencia de cara a los años por venir.
